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PROYECTO M_I APARTAMENTO EN PORTONOVO

DE PISO A PRECIOSO APARTAMENTO LLENO DE LUZ

Miriam y su familia decidieron mudarse a Portonove por motivos laborales. Tenian un apartamento familiar que podía cumplir su propósito pero precisaba de una reforma integral. Un pequeño piso con tres dormitorios fue el punto de partida para llegar a un apartamento de concepto abierto con 2 dormitorios y vestidor. Decidieron sacrificar un espacio para dar al resto de habitaciones los metros que estaban pidiendo a gritos. De este modo y haciendo un minucioso estudio de la distribución se consiguió rentabilizar al máximo los metros convirtiéndolo un un aparrtamento super práctico y actual con un marcado estilo Nórdico y toques industriales.

DANDO FORMA AL PROYECTO

En este caso se derribaron todos loa tabiques de la vivienda y se redistribuyó todo según los diseños aprovechando cada centímetro cuadrado.

La principal atracción de este apartamento e su zona de día compuesta por cocina-comedor y sala de esatr en un concepto abierto. A destacar la bonita cocina con mobiliario blanco y una peninsula con cristalera que separa la zona de comedor de ésta. Otro punto fuerte de este espacio es el insertable de pellets que otorga a la vivienda un sistema de calefacción eficiente por conductos al tiempo que ofrece una bonita visión del fuego desde el sofá de la sala. Como no podía ser de otra manera se aprovecharía el módulo de la chimenea para la instalación de los medios audiovisuales dejando espacios laterales para almacenamiento.

Otro punto fuerte en este proyecto fue la creación de un vestidor en el dormitorio principal…parecía imposible por los metros disponibles, pero gracias a la instalación de una cristalera separativa en el centro del dormitorio conseguimos crear un bonito cabecero para la cama y la dvisión que necesitabamos para el vestidor.

La fabulosa luz que entra a raudales por todos los ventanales exteriores del apartamento ha facilitado la sensación de espacio de este fabuloso apartamento. Luz, diseño, practicidad y vistas al mar…¿qué más se puede pedir?